Blefaroplastia

BLEFAROPLASTIA

La piel del párpado es la piel más delgada que hay en el rostro y la primera que muestra los efectos del paso del tiempo.
La blefaroplastia es una intervención para eliminar los excesos de piel o de grasa en los párpados que dan a la mirada y, por tanto a la persona, un aspecto cansado o
triste.

Técnicas empleadas

Una blefaroplastia se puede realizar bajo anestesia general, local y con el paciente sedado para su mayor comodidad. La operación suele durar de una a dos horas.

Como norma general las incisiones se suelen hacer en las líneas naturales del los párpados, en el surco del párpado superior e inmediatamente bajo las pestañas del parpado inferior. A través de las incisiones, la grasa se recoloca o extirpa a la vez que también se extirpan piel y/o músculo. Las heridas se cierran con suturas muy finas.
La herida del párpado inferior también puede colocarse por dentro de éste (transconjuntival), quedando así completamente oculta.

Recuperación

Después de la intervención su cirujano le lubricará los ojos con alguna pomada y le aplicará un vendaje. Sus párpados pueden estar irritados y podría sentir alguna molestia o escozor que son perfectamente controlables con los analgésicos habituales.
Deberá dormir con la cabeza elevada durante unos días y aplicarse unas compresas frías para reducir la inflamación y moraduras (éstas suelen durar de una a dos semanas y varias dependiendo del paciente).
Su cirujano le enseñará a lavarse los ojos y a aplicarse gotas para mantenerlos húmedos y evitar la sequedad. Es aconsejable que utilice gafas de sol para evitar la exposición solar en las moraduras, ya que la piel podría pigmentarse de otro color.
La mayoría de los pacientes reinician su trabajo en unos siete a diez días.

Riesgos

Las posibles complicaciones de estas intervenciones suelen ser escasas y menores. Para evitarlas consulte con su cirujano cualquier condición médica que presente y cualquier medicación que esté tomando, así como si es fumador o tiene alguna anomalía visual.
Aunque es muy raro puede existir una reacción alérgica a la anestesia, infección o hematomas. Después de la cirugía puede existir visión borrosa e incapacidad para cerrar los ojos durante unos días. En muy raras ocasiones puede existir una inclinación del párpado hacia fuera el “ectropión”. Todas estas situaciones requieren una cirugía secundaria.